miércoles, 12 de agosto de 2020

Reunión de Mujeres!!

 Todos los martes a las 16:00 hs. nos reunimos por ZOOM!! Para orar y pasar un tiempo juntas!! No te lo pierdas!

Podés descargar la app en tu celular tocando en este enlace: https://play.google.com/store/apps/details?id=us.zoom.videomeetings&hl=es_AR


Devocional

~ Devocional 10|08|20 por Ana Pérez ~




*Sal 73:28, TLA* Pero yo estaré cerca de ti, que es lo que más me gusta.Tú eres mi Dios y mi dueño,en ti encuentro protección; ¡por eso quiero contar todo lo que has hecho! Existen muchas cosas buenas, que podemos disfrutar, que nos satisfacen y dan alegría a nuestra vida. Pero sólo la presencia de Dios puede satisfacer el alma y llenar el corazón. El salmista dice "... yo estaré cerca de ti, que es lo que más me gusta".

El había experimentado que nada en esta tierra podía compararse al estar con Dios. Se entregó por completo al punto de decir. "Tú eres mi Dios y mi dueño". Era tal su gozo que no podía callarlo. Agrega: "¡por eso quiero contar todo lo que has hecho!" 

Que en este tiempo podamos, como el salmista, buscar a Dios de tal manera que podamos, en todos los órdenes de nuestra vida, volver a ponerlo en primer lugar.

El Salmo 34: 8 nos alienta:
"Gustad, y ved que es bueno Jehová; Dichoso el hombre que confía en él." Dios mismo nos llama a buscarle y a comprobar que no hay nada mejor que vivir en su presencia.

Aunque hay mucho por hacer, el Señor nos llama a estar con Él. A escuchar su voz.

El desafío es a atreverse a dejar todos nuestros proyectos y anhelos en sus manos, para ser transformados una vez más.

Sólo así podremos andar en su perfecta voluntad.

viernes, 7 de agosto de 2020

Devocional

~ Devocional 8|08|20 por Adriana y Mario Urquiza ~





*Gálatas.6:9-10*
No nos cansemos de hacer el bien.
Es desalentador hacer continuamente el bien y no recibir ninguna palabra de agradecimiento o ver resultados tangibles.

Pablo dice que no nos cansemos de hacer el bien, desafió a los gálatas y nos desafía a nosotros a seguir haciendo lo bueno y confiar a Dios los resultados. A su tiempo cosecharemos bendiciones. Hay una recompensa para todos los que se dedican sinceramente a hacer el bien, aunque nuestra recompensa se demore de seguro llegará.

No tenemos que discriminar a nadie a la hora de hacerle bien. No hay que hacer el bien a aquellos que me lo puedan devolver, eso es manipulativo y egoísta. Hacer el bien no es sólo para los que amo. Ni para los que me caen bien. 

El bien se hace a todos y sin esperar nada a cambio.
Pablo dice: según tengamos oportunidades, hagamos el bien a todos, y mayormente a nuestros familiares en la fe.

El apóstol Pablo no dice tiempo, sino oportunidad. Mientras tengamos vida en este mundo, tenemos tiempo, pero no siempre tenemos las oportunidades de hacer el bien, por lo que no deberiamos dejar escapar ninguna de esas oportunidades, las cuales nunca vuelven, podran venir otras, similares, diferentes, pero lo que pasaron sin ser aprovechadas, nunca mas volverán, y de ellas se nos pediran cuentas, conforme a lo que dice en Santiago 4:17 Todo el que conoce el bien que deberá hacer, y no lo hace, tiene pecado. Finalmente, hay que hacer el bien a todos, pero en especial a nuestra familia de la fe, que son: a los débiles en la fe, a los recién convertidos, en estos tiempo difíciles que estamos viviendo con esta pandemia de no olvidarnos de hacer el bien a los ancianos, ayudando con sus compras o algún trámite, si tenemos esa oportunidad de ayudarlo, dando palabras de ánimo, de fe y esperanza, hablándole del Señor a todos aquellos que lo necesiten.

Hacer el bien sin cansarnos, aunque no tengamos resultados, sin dejar de pasar cada oportunidad, porque la cocecha de nuestros actos solo puede ser completa en la eternidad.

No te canses de hacer el bien, se que afuera pareciera que todos estan en tu contra, confia. Haz el bien, no te dejes convencer por los demás, sigue los principios de Cristo y haz el bien en todos.
Siempre que tengas oportunidad haz el bien, sin importar quién o cómo. Haz el bien; muchas veces querras hacer lo contrario con personas que quizas te lastimaron, si es así, pide a Dios que ponga amor y perdón en tu corazón.

Acuérdate de que las oportunidades siempre estarán, aprovéchalas para hacer el bien y concéntrate en hacerle bien a tus hermanos en la fe.

jueves, 6 de agosto de 2020

ReCreo!!

Los Viernes!! ReCreo!! Si tenés entre 12 ó 13 años Te esperamos por ZOOM!!

Conectate:
facebook: https://www.facebook.com/ipnpdc/
Instagram: https://www.instagram.com/ipnpdc/

No te lo pierdas!!!

Atención!!

Especial Santa Cena - Domingo 9 de agosto.



Nuestra Web

Encontrá los devocionales diarios, las prédicas, y mucho más en nuestra página web.



Reunión de Agosto!!

Misión Martus
Preparate!! No te lo pierdas!!

x YOUTUBE

Devocional

~ Devocional 6|08|20 por Dámaris y Andres Elía ~




*Hechos 2:46-47 RV60* 
"y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.”

Las características de los primeros cristianos era la unidad, la unidad de doctrina, la unidad en el pensar y el actuar, la unidad de convicción, de fe, y de un mismo propósito (Hechos 4:32; Efesios 4; Malaquías 2:10; 1 Corintios 1:10, 10:16-17; Gálatas 3:26-28; Hebreos 10.24-25). Esa unidad que ellos manifestaban estaba aferrada en la persona de Jesucristo y de lo que Él enseñó (Juan 17). 

Juntos, compartían, se alegraban y alababan a Dios conscientes de su amor y de que su Espíritu no habitaba en edificios, sino que moraba en sus propias vidas, creyendo en las palabras de Jesús cuando dijo que su Presencia estaría en la unidad, en el acuerdo de dos o tres personas. 

La iglesia crecía en esta unidad con Cristo, su Palabra y sus hermanos. El favor de Dios estaba con ellos. Esta es la iglesia que impactaba a las ciudades y la iglesia a la que Dios añadía a los que “habían de ser salvos”.

Que podamos tomar su ejemplo, crecer en la unidad, en el estudio de la Palabra, en la oración y en la vida de cuerpo con los hermanos.